Es la oportunidad de demostrar cómo aplicas lo aprendido. Con preparación, práctica y confianza, cada alumno puede alcanzar sus objetivos. Los profesores cuentan con recursos alineados con las directrices universitarias para guiar este camino. Todo está pensado para que el esfuerzo tenga sentido y el futuro académico se construya sobre bases sólidas.

• Guías.

• Modelos de examen por materia.

• Directrices por universidades

• Practicar con modelos oficiales: familiarizarte con la estructura y tipo de preguntas de cada materia.

• Entrenar competencias: no basta con memorizar; hay que saber aplicar, razonar, justificar  y comunicar.

• Cuidar la expresión escrita: revisa ortografía, gramática y claridad, por que tienen más peso en la nota final.

• Planificar el estudio: usa técnicas como repetición espaciada, autoevaluaciones y simulacros de examen.

• Gestión del tiempo en el examen: lee todas las preguntas, organiza tu respuesta y deja tiempo para revisar.

• Orientar hacia competencias: diseñar actividades que fomenten la aplicación práctica del conocimiento.

• Simulacros de examen: preparar pruebas similares a las oficiales para que los alumnos se adapten al formato.

• Reforzar la expresión escrita: dedicar tiempo a la corrección de redacción y coherencia en las respuestas.

• Alinear contenidos con directrices universitarias: garantizar que los alumnos trabajen sobre el mismo guion que se exige en la PAU.